Si estás al día con el Podcast no te cogerá por sorpresa. Si todavía no lo has escuchado, en el episodio 64 te cuento una noticia: dejo de contar con un entrenador personal de triatlón.
Esto significa que desde hace unas semanas, mi Training Peaks está “vacío”, y yo soy el responsable de llenarlo como considere. De ahí el título de esta edición: asumiendo el control.
No me voy a extender demasiado sobre los detalles, pues ya está más que explicado en el episodio.
Aunque es un cúmulo de razones, la principal es una: me apetece.
Y aunque la decisión siempre da un poco de vértigo, y especialmente cuando tu nivel de satisfacción es absoluto, cambiar algo da un poco de miedo. ¿Por qué tocar algo que funciona?
Lo cierto es que ya me apetecía dar este paso. Y contarlo. Se juntan dos cosas: mi inquietud por probar, aprender y explorar. Y mis ganas de contarlo, claro.
Y en este sentido, me gustaría incidir sobre alguno de estos rasgos de mi personalidad y decirte por qué esto NO es para todo el mundo.
Asumir el control es algo que no siempre es fácil. Al ser animales sociales, y servirnos de fuentes de apoyo para todo, saberse uno como máximo y único responsable de una causa, es un ejercicio de sinceridad máximo. Cuando los éxitos y fracasos son compartidos, siempre hay alguien a quien podrías culpar o alabar. Cuando los éxitos y fracasos son de uno solo, es muy importante asumir el control de la situación, ser crítico y exigente pero también compasivo y comprensivo. Al fin y al cabo, el centro de tus pensamientos serás tú mismo.
Sin embargo, y aunque pueda parecer que llevo “poco” en esto, o que “peco de inmaduro” (estoy seguro de que alguna gente puede verlo así), lo cierto es que en mi vida ya me he enfrentado muchas veces a situaciones de este tipo: asumir el control. Tomar el mando.
En mi día a día, tomar decisiones es un factor diferencial. Sin embargo, debo decir que esto no es plato de buen gusto para todo el mundo. En organizaciones corporativas, en equipos deportivos, o incluso en grupos de amigos, se conforman jerarquías, roles, papeles. Seguro que identificas situaciones en las que, por ejemplo, te ibas de vacaciones con un grupo de amigos y no todo el mundo participaba igual en la toma de decisiones.
Siempre está el/la motivado/a que organiza, gestiona y lidera. Y siempre existe “el seguidor”, aquel que se suma a la idea ganadora o mayoritaria sin demasiado esfuerzo. Todos jugamos un papel en los grupos, y es importante que exista un equilibrio entre los perfiles. Cuando un grupo tiene demasiada densidad de “líderes” se producen, irremediablemente, choques. Así ha sido en muchas especies y contextos a lo largo de la historia.
Llegados a este punto, y sin que suene pretencioso, creo que ya te imaginas qué arquetipo es el que me define. Y es que sí: soy el que organiza viajes, el que inicia los planes, el que empuja los cambios. Y ahora, también, el que pone los entrenamientos.
Sin embargo, aunque este sea un rasgo de mi personalidad, eso no implica que sea la forma correcta de ser. Ni mucho menos pienso eso. Pero sí creo que para alguien como yo, es más fácil tomar una decisión de este tipo.
Si has leído o escuchado algo de lo que suelo crear, te habrás dado cuenta de que entender el por qué de las cosas es una personalidad y es la mía. Eso me lleva en muchas ocasiones a perderme buceando sobre cosas irrelevantes por el mero placer de entender el por qué. Frikismo puro, vamos.
Eso no implica que lo sepa todo. Una de las cosas que intento vigilar es no ser víctima del efecto Dunning-Kruger. Si no lo conoces, esta infografía lo representa bien:
El efecto Dunning-Kruger no es muy diferente del “síndrome del cuñado”. Creerse que por haber leído un par de artículos dominas un área de conocimiento. Por eso creo que asumir el control, en una situación como la que yo lo hago, optando por la vía del auto-entrenamiento, es una fórmula válida, pero creo que es conveniente contar con algunas características.
¿Cuáles son esas características?
Imagina que somos una caja de herramientas. Cuantas más herramientas tengamos dentro de esta caja, mejor desempeño tendremos en diferentes tareas y roles. ¿Cuáles son “mis herramientas” para el autoentrenamiento?
Curiosidad innata: sin caer en el efecto Dunning-Kruger, y como ya te dije, soy un curioso. Me gusta saber. Entender. Conocer el por qué de las cosas. Como deportista “entrenado” debo ser un coñazo para el entrenador, porque siempre me preguntaba “el por qué” de esa sesión. Por supuesto, no quiere decir que cuestione todo. Simplemente reflexiono sobre por qué esto así o esto asá.
Pensamiento crítico: he leído mucho sobre sesgos cognitivos. Y aunque nadie está a salvo de ellos, puesto que son necesarios para la supervivencia en ciertos contextos, intento liberarme de esos sesgos cuando analizo cosas.
Perfil analítico: por si no lo sabes, llevo más de 7 años gestionando campañas de publicidad. He llegado a manejar inversiones superiores a los 4 millones de euros anuales en publicidad online. Como imaginarás, analizar resultados es fundamental en mi trabajo: nadie entrega un cheque en blanco sin pedir resultados a cambio. Eso hace que mi ojo esté entrenado a conectar líneas, gráficos y curvas de tendencia. Y hace más fácil que entienda así el CTL, ATL o Fatigue cuando me expongo al cuadrito famoso de Training Peaks.
Suficientemente flexible: aunque soy metódico y analítico, también me gusta fluir o dejarme llevar por las sensaciones. Eso que dicen los más sabios, como Iván Raña, de escuchar el cuerpo y conectar con nosotros mismos. Es importante saber diferenciar la fatiga de la pereza. Pero esto también se entrena.
Disciplina: un factor importante a la hora de optar por el auto-entreno es ser disciplinado. Un ejemplo: nadar no es mi disciplina favorita. Si me quiero contar películas podría decir aquello de que nadar solo representa un 10% de la distancia total de lo que hago: triatlón de media y larga distancia. Sin embargo, sé que si quiero progresar como nadador, necesito hacer unas 3-4 sesiones semanales de natación. Trabajar la técnica y las series. Salir a aguas abiertas. En definitiva, ser disciplinado y hacer lo que toca, y no solo aquello que apetece.
Y aunque podría citar alguna más, creo que esto ya va quedando demasiado largo, así que vamos con la última y más importante:
Disfrutar del proceso: si algo he repetido desde el primer episodio de KM226 es la importancia de disfrutar del camino. Y para mí, tomar el control y responsabilidad de mi destino me da un puntito adicional de satisfacción. Es puro hedonismo. Sentirme capaz. Enfrentarme a esto me saca de mi zona de confort; es “cómodo” pagarle a un entrenador, recibir la planificación y cumplir con lo estipulado. Sin embargo, a mí me gusta saborear las cosas. Y creo que añadir este punto de complejidad hará que disfruta, todavía, un poquito más.
Ser un perfil explorador es cansado. No sé lo qué “piensan” otros, pero mi cabeza está siempre un poco en estado de alerta, intentando aprovechar cualquier input para sacar un aprendizaje o ventaja de ello. Veo “oportunidades” y puntos positivos en diferentes ámbitos. Y eso hace que mi curiosidad sea infinita.
Sin embargo, en la vida a veces es importante saber cerrar la mirilla, enfocarse y centrarse en lo importante.
Lo importante:
🎧 Aitor Viribay es uno de los referentes mundiales en nutrición deportiva. Trabaja con el equipo INEOS Grenadier, equipo ciclista World Tour, y también con Kilian Jornet: uno de los mejores deportistas de resistencia (y en general) de todos los tiempos. El caso es que Aitor y otro grupo de investigadores han publicado un podcast, “90 gramos”, en el que tratan temas relacionados con la fisiología y el cuerpo humano. El episodio 2: “¿Por qué somos vagos?” es una auténtica delicia.
👟 Mi última adquisición para el zapatero han sido las New Balance Rebel V4. Son una de las zapatillas llamadas a ser Top ventas este 2024. Llevo ya unos 100 kilómetros en 3 semanas con ellas y estoy encantado: rodajes, series, tempo. Espuma muy suave y un peso de solo 200 gramos en talla 42. No está patrocinado, pero en la tienda de Bikila Vigo, Dani Bargiela se portó genial y me las consiguió, así que te dejo aquí el link 😜
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Te agradecería feedback sobre los contenidos. En los últimos días me ha escrito gente con la que no había interactuado y eso me está ayudando a pensar y enfocar los contenidos de KM226. Si te gustaría que comentase algún tema en particular soy todo oídos. Y en el grupo de Telegram estaremos encantados de recibirte: 👇